¿Cuántas veces has intentado dejar de fumar y has vuelto a caer? Reincidir en esta adicción es habitual, de hecho, tan solo entre el 5 y el 8 por ciento de las personas que logran abandonar este hábito lo hacen por sí solos. Sin embargo, este porcentaje aumenta cuando se está acompañado de un profesional. El farmacéutico puede desempeñar un papel relevante y ayudar a los fumadores a conseguir este objetivo, tal y como contamos en este artículo de Apoteka.
"El farmacéutico desarrolla una importante labor en la lucha contra el tabaco, tanto en lo referente a la educación sanitaria, la prevención del tabaquismo y la incentivación para abandonarlo; como el asesoramiento de aquellos que acaban de dejar de fumar, la propuesta de tratamientos que no requieran receta médica, el reforzamiento de las pautas y el seguimiento de aquellos tratamientos establecidos por el médico", explican desde el Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza (COFZ).
En este sentido, Mercedes Arias, vocal de Atención Farmacéutica del COFZ, señala tres pasos a seguir para ello. Primero, avisar a las personas más cercana de la intención de abandonar el tabaco porque su "comprensión es importante para el éxito". Asimismo, también se debe marcar el día D en el que ya no se fumará ningún cigarro. Por último, Arias subraya que "las ganas de fumar no son eternas, desaparecen al cabo del tiempo", por ello, es necesario tener paciencia y fuerza de voluntad.
Las ventajas de dejar de fumar no solo benefician al individuo, sino también a su entorno y a la sociedad, de manera general. Está demostrado que a los pocos días de dejar el tabaco el exfumador presenta mejoras en su salud. Los expertos mencionan que los beneficios de dejar este hábito logran:
No obstante, los mayores cambios se registran al cabo del tiempo, puesto que se disminuye el riesgo de otras complicaciones asociadas al consumo de tabaco. Arias apunta que el exceso de riesgo de enfermedades coronarias (como el infarto y la angina de pecho) se reduce a la mitad; a los cinco años, se elimina el 50 por ciento de riesgo de cáncer de boca, faringe y esófago; y a los diez años disminuye a la mitad el riesgo de cáncer de pulmón, de hecho a los 15 o 20 años de dejar de fumar ya se elimina totalmente este riesgo.
En concreto, más de 50.000 personas mueren en España por el consumo de tabaco cada año, las causas principales son: enfermedad cardiovascular, cáncer de pulmón y EPOC. De hecho, la esperanza de vida disminuye entre 6 y 10 años si se compara los fumadores y los no fumadores. En la farmacia cuentan con cuatro productos que se pueden adquirir sin receta y que ayudan a aliviar la necesidad de nicotina, como chicles, comprimidos para chupar, parches y spray bucal.
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