¿Qué deberías tener en cuenta en tu segundo embarazo?

¿Estás esperando otro hijo y no sabes qué diferencias existen entre el primer y segundo embarazo? En este artículo de Apoteka, abordamos cómo se vive una segunda gestación.

El embarazo produce multitud de cambios en el cuerpo de la embarazada. Los cambios hormonales propios de la gestación afectan a la mujer en todo su organismo y se puede incluso afirmar que éstos son los mismos cuando se tiene un segundo hijo.

De hecho, los expertos determinan que muchas de las sensaciones físicas se presentan un mes antes que en el primer embarazo. Esto se debe a que es menos probable que el útero ceda, ya que se ha estirado antes, pero también porque la mujer es más consciente de lo que sucede en su cuerpo.

No obstante, recuerdan que cada embarazo es único y, en consecuencia, los cuidados prenatales requieren el mismo nivel de atención que la vez anterior. Eso significa que es necesario acudir a revisión con la misma frecuencia.

Aunque no hay complicaciones específicas para la segunda gestación, en esta ocasión la mujer tiene -lógicamente- más años y, por tanto, desde la Clínica Universidad de Navarra advierten de que se pueden encontrar algunas complicaciones, como más probabilidad de cromosomopatías en el feto –síndrome de Down, entre otros-.

Asimismo, detallan que se tendrá en cuenta si el primer parto fue por cesárea, en cuyo caso se vigilará de forma más estrecha la dilatación del segundo parto para evitar complicaciones por la cicatriz uterina.

Características del segundo embarazo

Los mismos profesionales indican que, en líneas generales, se llevan a cabo los mismos controles durante el segundo embarazo. No obstante, reconocen que se pueden evitar algunas analíticas como el grupo y Rh materno y algunas serologías si ya fueron positivas en la primera gestación, por ejemplo inmunidad frente a toxoplasmosis o rubeola.

En cuanto a la ganancia de peso, también coinciden el segundo embarazo en que el abdomen crece antes, pero la ganancia ponderal total debe ser similar a la del primer embarazo, entre 7 y 12 kilogramos.

Por otro lado, destacan que si una mujer que ha padecido antes diabetes gestacional, preeclampsia o anemia, es más propensa a desarrollarlas en una segunda gestación. "Por eso, es importante referir detalladamente los antecedentes a su ginecólogo durante la primera consulta de embarazo", aconsejan.

Otras características son:

• No hay diferencias en la fisiología de la mama entre ambos embarazos.
• La subida de leche se produce al mismo ritmo pero la madre es esta vez más paciente y, en consecuencia, el grado de ansiedad es menor.
• Es más frecuente necesitar una episiotomía en el primer parto que en los posteriores
• Acudir al hospital si se produce la rotura de la bolsa amniótica, sangrado o hay contracciones dolorosas que no ceden tras una hora en reposo.

A nivel psicológico, es normal sentirse un poco distante emocionalmente en este segundo embarazo. Seguramente se gastó más energía mental para el primero y ahora, que hay otro hijo al que cuidar, se puede percibir menos emocionante. No te preocupes, es normal y lo querrás igual que al primero.