Caries interdental: qué es, síntomas y tratamiento

La caries interdental puede convertirse en un enemigo silencioso y difícil de detectar en nuestra boca. La también denominada caries interproximal puede poner en riesgo nuestra salud bucodental y llevarnos a perder piezas dentales, sobre todo, si ignoramos sus síntomas o si descuidamos los pasos de una limpieza completa.

Para evitar que este tipo de caries ponga en riesgo nuestra sonrisa, ¡no dejes que te sorprenda! Incluso, si cepillamos nuestros dientes todos los días, este problema puede aparecer. 

La buena noticia es que incorporando unos pequeños cambios en tu higiene dental, podrás reducir el riesgo de sufrir caries interdentales. 

Qué es una caries interdental

La caries interdental es un tipo de caries que afecta a dos dientes juntos. Aparece en los espacios de unión, que es el lugar donde el cepillo dental no siempre llega y donde es más fácil que se acumulen restos de alimentos y sarro. 

Se trata de un problema de muy rápido progreso, ya que se aprovecha de la acumulación de bacterias en esta zona que es mucho más fina que el área de masticación. 

La placa dental, que permanece en los estrechos espacios entre dos dientes, va creando una película pegajosa (placa bacteriana) que libera ácidos y deteriora el esmalte dental. Si no se remueve o detecta a tiempo, se producen los orificios típicos de las caries y que se van haciendo más profundos.

De acuerdo con Mayo Clinic, las caries aparecen por una combinación de factores entre los que se encuentran:

• la proliferación de bacterias en la boca;
• el consumo frecuente de bebidas azucaradas;
• comer tentempiés con regularidad;
• no realizar una limpieza bucal eficiente. 

También, si tienes dientes apiñados o usas aparatos de ortodoncia o prótesis, puede ser más fácil que la caries interproximal aparezca. 

Principales síntomas

Los síntomas dependerán de la profundidad del daño y la extensión de la zona afectada. Entre su sintomatología más frecuente se encuentra:

• Mayor sensibilidad dental al calor, al frío o a las bebidas y comidas dulces.
• Dolor durante la masticación.
• Mal aliento o halitosis. 
• Manchas entre los dientes, de color blanco o marrón.
• Inflamación, enrojecimiento o sangrado de las encías.

Cuando la caries interproximal no es profunda, se puede sentir dolor o mayor sensibilidad al comer o beber alimentos fríos, calientes o azucarados. Pero una vez que avanza hasta la pulpa dentaria (que es el tejido blando dentro del diente) puede dolernos sin que estemos comiendo ni bebiendo. 

En adelante, puede infectar la raíz, causar mucha sensibilidad al masticar o al presionar con el dedo o con la lengua, y hasta acabar con la pulpa para siempre.

Tratamiento para una caries interdental

Lo que convierte a las caries interdentales en una auténtica pesadilla es que pueden ser más difíciles de detectar que las caries situadas en las superficies lisas de los dientes.

Sin embargo, es posible hacer una detección precoz si acudimos al dentista periódicamente, al menos una vez al año o cada 6 meses. También, una radiografía dental ayudará al dentista a diagnosticar el problema, ya que no siempre se muestra a simple vista.

Otro método es usar la seda dental. Si se deshilacha, puede ser una advertencia de caries en esta zona.

En cuanto a su tratamiento, el profesional de la salud dental puede reparar ambas piezas dentales en una sola sesión. Si solo está afectado el esmalte dental, puede aplicar una remineralización con flúor para favorecer la autoreparación.

Ya cuando hay mayor afectación, el odontólogo procederá a limpiar la zona, taladrar y aplicar empaste. Si hay daño en la pulpa, se hará una endodoncia (extraer la pulpa dental y la cavidad, para rellenar y sellar) o extraer la pieza dental.

¿Cuál es la mejor manera de prevenir la caries interdental? Instituciones como la American Dental Association (ADA) recomiendan:

• Cepillado después de cada comida 

El uso de pasta dental con flúor, un cepillo de cerdas suaves y una buena técnica de cepillado de dos minutos son claves.

• Uso diario de seda dental

El hilo o seda dental, junto con un correcto cepillado, son unas de las mejores maneras de prevenir la caries entre los dientes. 

Un estudio divulgado por la Revista de Odontología Comunitaria y Epidemiología Oral advierte que las personas que no utilizan hilo dental pueden tener 1,46 veces más riesgo de sufrir este problema.

• Incorporar cepillos/palillos interdentales en la rutina 

Los dispositivos interdentales pueden ser muy efectivos para disminuir la acumulación de placa entre las piezas dentales, sobre todo en personas con problemas en las encías. Así lo advierte una investigación publicada en la Revista Internacional de Higiene Dental.

Otras recomendaciones son:

• Evitar consumir productos azucarados o con ácido, como las bebidas con cola.
• Realizarse limpiezas dentales solo con profesionales de la odontología.
• Finalizar la limpieza con enjuague bucal con flúor.

En caso de dudas, recuerda siempre hablar con tu dentista.