Digestivo

Problemas digestivos más comunes: causas y tratamientos

¿Quién no ha sufrido problemas digestivos en algún momento? En la farmacia se pueden encontrar numerosos tratamientos para calmar estos síntomas. Tal y como indican los profesionales sanitarios, los problemas digestivos más comunes suelen ser: cálculos biliares, diarrea, estreñimiento, gases y reflujo gástrico. Más allá de estas patologías que son temporales, están también los problemas crónicos como la enfermedad celíaca, la enfermedad del hígado, la intolerancia a la lactosa o el síndrome de intestino irritable. ¿Cómo tratar los problemas digestivos? En las boticas hay plantas medicinales que pueden aliviar las molestias provocadas por estos problemas digestivos. Se pueden tomar a través de infusiones o cápsulas. Asimismo, los farmacéuticos aconsejan adoptar algunos hábitos como mantener una posición erecta para comer, evitar el consumo de bebidas carbonatadas, no hacer ejercicio físico ni antes ni después de las comidas, no acostarse nada más terminar de cenar o mantener un horario regular para las comidas.

Productos de farmacia y consejos para tratar problemas digestivos

La farmacia puede ser clave en el tratamiento de problemas digestivos leves como la diarrea, el estreñimiento, el reflujo gástrico o la acumulación de gases. Existen muchos productos de venta libre que ayudan a combatir estas patologías. Concretamente se puede tomar: Complementos alimenticios con una alta concentración en fibra para evitar el estreñimiento. En este mismo sentido, también favorecen la digestión porque estimulan la secreción de jugo gástrico y alivian la acidez del estómago. Por ejemplo, hay productos de este tipo formados por alcachofera, cúrcuma, menta piperita, diente de león, cardo mariano, hinojo o genciana. Infusiones: de las mismas plantas que forman los complementos alimenticios también se pueden tomar infusiones. Siguen manteniendo todas las propiedades y los efectos nombrados. Por último, es importante mantener unos hábitos saludables a la hora de comer. En esta línea, hay que mantener unos horarios regulares de comidas y tener una dieta variada y equilibrada.