Hiperplasia gingival: síntomas, causas y tratamiento
El tejido gingival crece de forma excesiva por ciertos fármacos o cambios hormonales.
La encía puede aumentar de volumen hasta recubrir casi todas las piezas dentarias
La hiperplasia gingival es una patología que hace referencia al aumento del tamaño de las encías. El tejido que hay alrededor del cuello de un diente crece de forma excesiva debido a, entre otras causas, el consumo de ciertos fármacos, diversas enfermedades sistémicas o por cambios naturales en el organismo. No se trata de un motivo de consulta muy recurrente pero, si aparece, es necesario realizar un examen completo del paciente.
Como ya hemos comentado anteriormente, la hiperplasia gingival puede estar causada por varios motivos. No obstante, el aspecto no varía demasiado aunque los orígenes sean opuestos. Lo identificarás cuando veas que el tejido gingival es más grande y muestra un color rojo brillante aterciopelado o un aspecto redondeado. Por lo general, se presenta en los dientes frontales, aunque en algunos casos también puede sucederse en los laterales de la lengua.
La hiperplasia es un término que hace referencia al aumento de tamaño en el tejido de un órgano cualquiera, el cual se produce por un incremento en el número de células que lo conforman. Y, dentro de esta patología, se pueden identificar dos grupos:
- Agrandamientos gingivales inespecíficos: reacciones inflamatorias crónicas en el tejido de las encías producidas por factores locales, como la placa bacteriana, cálculos y bacterias patógenas.
- Agrandamientos gingivales específicos: ocasionados por cambios hormonales durante etapas como el embarazo o la pubertad, y como respuesta al consumo de algunos medicamentos.
Así, la Academia Americana de Medicina Oral advierte de que un sobrecrecimiento localizado puede ser una lesión tanto benigna como maligna.
Tratamiento de la hiperplasia gingival
La hiperplasia gingival, explican desde Elsevier, es un efecto secundario que puede afectar a un 50 por ciento de pacientes tratados con fenitoína y, con menor frecuencia, a aquellos que consumen antiepilépticos como ácido valproico, carbamazepina, fenobarbitona y vigabatrina. Asimismo, señalan que su aparición también se relaciona con la ciclosporina, la nifedipino y otros bloqueantes de los canales de calcio, así como a los agentes diltiazem, verapamilo, amlodipino, felodipino, manidipino, nicardipino y nitrendipino.
Sobre los problemas que genera, los mismos expertos comentan que esta patología provoca:
- Dolor al masticar
- Trastornos del habla
- Hemorragia gingival
- Alteraciones periodontales
- Oclusión dentaria
- Daños estéticos
Por otro lado, indican que la hiperplasia gingival afecta normalmente de forma más importante al maxilar superior que al maxilar inferior. "Después de algunos años, en algunos pacientes, la encía puede aumentar de volumen hasta recubrir casi todas las piezas dentarias", detallan.
En cuanto a su tratamiento, desde MSD destacan que el tejido hipertrofiado debe:
- Extirpar la parte sobrante a partir de una intervención quirúrgica con bisturí o láser
- Sustituir o dejar de tomar los fármacos causantes, pero siempre consultándolo previamente con el médico
- Llevar a cabo una "higiene bucal escrupulosa", ya que ésta puede minimizar las recidivas.
En este último punto, la Academia Americana de Medicina Oral apunta que una mala higiene bucal puede hacer que aumente la inflamación, la cual puede ser un factor causante de la hiperplasia. Por ello, recomiendan usar un enjuague bucal antiséptico para mantener la boca libre de microorganismos.
