¿Qué son los pezones invertidos?

pezones invertidos

Los pezones invertidos pueden ser de nacimiento o aparecer con el paso de los años.

Los pezones invertidos no impiden la lactancia materna, tal y como explican los expertos

Andrea Pérez
Se lee en 3 minutos

No hay unos pechos ni unos pezones iguales. Estas partes del cuerpo son muy diferentes de una mujer a otra. En este artículo, abordamos qué son los pezones invertidos, una variedad que es muy habitual aunque bastante silenciada. De hecho, según los expertos, afecta a entre el 2 y el 10 por ciento de las mujeres.

"La mayoría de las mujeres tienen pezones que protruyen ligeramente cuando están en reposo y se hacen más prominentes al estimularlos. Los pezones invertidos son aquellos que a pesar de la estimulación, apenas cambian su configuración. Tienen en estado de reposo forma de ombligo y se hunde dentro de la areola cuando se estimula", explican desde la Asociación Española de Pediatría (AEP). Es decir, en vez de sobresalir hacia el exterior, miran hacia la mama y se crea una pequeña cavidad.

Esta condición no tiene por qué acarrear ningún problema de salud. Sin embargo, sí que puede interferir en el agarre del bebé si se está en periodo de lactancia.

Síntomas y causas de los pezones invertidos

Los profesionales señalan varias características de los pezones invertidos:

  • Esta anomalía puede ser de nacimiento o desarrollarse a lo largo de los años.
  • En caso de desarrollarse más tarde, habrá que descartar que se trate de un tumor, puesto que no es inusual que al palparse la mama haya un bulto.
  • Suele afectar a la autoestima de las mujeres, ya que su estética es diferente al resto de pezones.
  • Si se trata de una malformación de nacimiento, no suele presentar síntomas. Simplemente, las bandas fibrosas del tejido mamario impiden que el pezón se desarrolle de forma normal y tiran de él impidiendo su salida.
  • Sin embargo, cuando aparece más tarde, puede cursar con dolor en el pecho o malestar general.
  • Asimismo, la piel puede tener un aspecto enrojecido e irritado.
  • El pezón también puede emitir secreción.
  • Entre las causas de los pezones invertidos están el envejecimiento, la mastitis (inflamación del tejido mamario) o ectasia del conducto mamario.

Por otro lado, hay que diferenciar entre pezón invertido y pezón retraído. En esta última situación, la areola también está hundida.

¿Cómo dar de mamar con pezones invertidos?

Debido a esta situación excepcional del pezón, desde AEP señalan varias recomendaciones para asegurar el agarre del bebé a él, cuidar el pecho y evitar dolor y grietas en el mismo:

  • Es fundamental el contacto piel con piel tras el nacimiento y después, el mayor número de horas al día. "Con ello se pretende favorecer un agarre espontáneo por parte del bebé, lo que también se puede facilitar si se ofrece al niño el pecho en la posición de crianza biológica, que es la que adoptan instintivamente las crías de los primates para mamar: bebé boca abajo sobre la madre, en contacto directo piel con piel", apuntan.
  • Es importante que el niño pueda abrir bien la boca para "abarcar más tejido areolar". Por ejemplo, la madre puede pinzar ligeramente la areola en la parte superior e inferior con el fin de favorecer la protrusión del pezón y el enganche del bebé.
  • La estimulación del pezón antes de la toma también ayudará a que el pezón salga.
  • Existen elementos como las pezoneras que son útiles si no se consigue un agarre que permita una succión adecuada. No obstante, hay que retirarlas en el momento en el que el niño se enganche y el pezón protruya.
  • Por último, también hay dispositivos que generan vacío en el pezón y ayudan a extraerlo, pero pueden ser molestos y ocasionar daño en la piel del pezón.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Apoteka está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.



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