Dolor en el empeine del pie: principales causas

El dolor de pie en el empeine es un problema frecuente. Desde deportistas y corredores hasta gente con una vida menos activa, lo cierto es que muchos podemos experimentar ese molesto dolor en la zona dorsal o superior del pie.

El dolor en el empeine puede comenzar como una sensación incómoda y luego intensificarse. Puede irradiarse hasta los tobillos, talón, rodillas, piernas, caderas y espalda, e incluso, dificultarnos nuestro caminar. Pero ¿qué lo causa?

¿Por qué me duele el empeine del pie? Algunas razones

El empeine es la zona de arriba del pie y se extiende desde la base de los dedos hasta el talón. Desempeña un papel muy importante en cualquier actividad que realicemos, ya sea andando, estando de pie o en reposo. 

Esta zona ayuda al pie a absorber el impacto del caminar, correr o saltar. Nos ayuda a conservar el equilibrio y estabilizarnos, y nos permite adaptar la pisada al terreno. 

Ahora bien, solo en el empeine se ubican 10 huesecillos, entre ellos, los  metatarsos o huesos de cada dedo. También, se localizan allí los nueve tendones que vienen de la pierna y que tensan hacia arriba los dedos. 

Cuando aparece el dolor de pie en el empeine, puede ser producto de lesiones en los huesos, músculos, ligamentos o tendones. O puede deberse a inflamaciones, problemas estructurales, mayor exigencia sobre esa zona, entre otros factores.

Conoce ahora algunas de las razones por las que te puede doler el empeine.

Tendinitis o inflamación del empeine

Si sientes un chasquido o crepitar de los tendones del empeine, ya sea al flexionar y extender tus dedos del pie, puede deberse a una inflamación de alguno de los tendones extensores. Es lo que se conoce como tendinitis en el empeine. 

Esto causa dolor e inflamación en el empeine o la parte dorsal del pie. Puede aparecer por:

• Uso de calzados inadecuados o muy apretados.
• Ejercicios en exceso o entrenamientos fuertes.
• Sobrecarga inapropiada en uno o varios tendones.
• Caminar o correr por terrenos irregulares.

Fascitis plantar

Se trata de una inflamación que involucra al talón y el empeine. Lo puedes identificar como un dolor o tensión que se extiende desde el talón hasta la base de tus dedos del pie. 

Los síntomas de la fascitis plantar pueden ser más notorios en las mañanas y después de caminar mucho o permanecer bastante tiempo de pie.

Para tratar este problema y aliviar los síntomas debes: 

• Realizar estiramientos de los dedos del pie.
• Usar zapatos apropiados que amortigüen tu pisada.
• Incorporar almohadillas que reduzcan la presión en el talón. 
• Tomar antiinflamatorios te puede ayudar a bajar la inflamación.

Fractura por estrés

Cuando se produce una lesión pequeña en alguno de los huesos del pie puede doler el empeine e inflamarse esta zona. Este tipo de grietas óseas pueden ser causadas por la repetición de una misma actividad física durante un tiempo largo. 

Para reducir el dolor, la inflamación y la sensibilidad ya sea en el empeine o en la planta del pie, necesitarás colocar hielo, descansar y utilizar algún analgésico.

Sobrepronación

La forma como se mueve tu pie cuando caminas o corres también puede ser una de las razones para sufrir de dolor de pie empeine. 

Si eres de las personas con pronación excesiva y que colocan primero el borde exterior del talón en el suelo y luego tu pie se mueve hacia adentro, esto puede impactar el empeine y aplanar mucho tu pie. El resultado es el daño de músculos, tendones y ligamentos, y por su puesto, dolor.

Si eres pronador en exceso, podrías sufrir además de dolores en la cadera, espalda y rodillas y experimentar problemas como callos y dedo en martillo.

¿Qué hacer? Mejora la calidad de tu calzado y usa zapatos que te den estabilidad. Un podólogo o un médico ortopédico pueden asesorarte sobre lo que es mejor para ti.

Pie cavo o pie plano

El dolor en el empeine puede deberse a la forma como están distribuidos los huesos del pie. Al respecto, hay dos situaciones que son muy conocidas:

• El pie cavo: cuando el empeine es muy prominente y se eleva.
• El pie plano: cuando no hay curvatura natural en la bóveda plantar.

En ambos casos, los ejercicios para fortalecer la musculatura del pie y la pierna, y el empleo de plantillas ortopédicas o zapatos especiales pueden ayudar a reducir los episodios dolorosos.

Ya conoces algunas de las razones del dolor en el empeine del pie. Los masajes y el descanso pueden ayudarte a aliviar estas situaciones, pero siempre es mejor que hables con tu médico. 

Así podrás evitar que el dolor en el empeine se agrave o te cause problemas en tu espalda, rodillas o tobillos.