Envejecer es un proceso natural de oxidación celular para el que por ahora no hay solución, ya que no tenemos la fórmula para la juventud eterna, pero sí que existen productos que nos ayudan a ralentizar esta progresión. Seguro que alguna vez has oído hablar de los antioxidantes, pero ¿sabes exactamente qué son? Lo cierto es que tienen mucha relación con la detención de la vejez. En este artículo, los farmacéuticos nos explican su función en nuestra piel y por qué es recomendable usarlos.
"Los antioxidantes son aquellas moléculas capaces de retrasar o prevenir la oxidación de otras. Esta oxidación se suele producir o iniciar en los radicales libres", explica Rosalía Gozalo, farmacéutica experta en Dermofarmacia. "Los antioxidantes se encuentran en la base de cualquier tratamiento destinado a proteger y cuidar nuestra piel", añade.
Una vez que conocemos qué son los antioxidantes es el momento de descubrir para qué sirven. La especialista señala que el empleo de estas moléculas tiene las siguientes funciones:
Sin duda, todas estas funciones que acabamos de nombrar son buenas para nuestra piel, pero vamos a descubrir más en detalle las ventajas que presentan. Concretamente, Gozalo menciona en este sentido cinco beneficios de los antioxidantes:
1- Fortalecimiento del sistema inmunológico de la piel, resistencia térmica y protección celular.
2- Reducción de arrugas, líneas de expresión mejorando la flexibilidad y textura de la piel.
3- Mayor luminosidad, tono más homogéneo.
4- Aceleración de los procesos de cicatrización y mejora de las marcas post cicatriciales.
5- Protección frente a las radiaciones solares y manchas en la piel.
Es recomendable que tanto hombres como mujeres utilicen antioxidantes para lograr todas estas ventajas de las que hablamos.
Para cuidar nuestra piel con estos antioxidantes es imprescindible saber qué productos de farmacia cuentan con ellos. Entre los principales antioxidantes que tienen aval científico y que podemos encontrar en la farmacia están:
Estos componentes se pueden encontrar en artículos de rituales de belleza como serums, lociones, aceites faciales, mascarillas, cremas o contornos de ojos. No obstante, también están presentes en cápsulas como complementos alimenticios. En esta línea, no solo evita el envejecimiento prematuro de la piel y combate los radicales libres, sino que también influye en la salud cardiovascular. Concretamente, protege los vasos sanguíneos y ayuda a mantener unos niveles adecuados de colesterol en sangre.
Por último, los antioxidantes también se pueden encontrar en los alimentos. Es decir, la ingesta de determinados productos puede contribuir al buen aspecto de nuestra piel. Como ejemplos, los vegetales, las legumbres, el té, las nueces, los cereales de grano y las frutas están compuestos por antioxidantes.
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