Los distintos tipos de flujo vaginal y lo que significan
¿Has notado tu flujo vaginal diferente últimamente? En este post te contamos los distintos tipos de flujo según el color y lo que significa cada uno.
¿Sabías que existen varios tipos de flujo vaginal y variaciones en sus colores? Que la vagina genere secreciones todos los días es algo normal. De hecho, es natural que este flujo cambie de color y textura a lo largo del mes.
Ahora bien, ¿cómo saber si la tonalidad, textura y cantidad de la secreción vaginal es saludable y cuándo no lo es? ¡Es lo que te explicaremos en este post!
Secreción vaginal ¿Qué es?
El flujo o secreción vaginal es una combinación de agua, moco del cuello uterino y células del cuello del útero y la vagina.
Este flujo, que se va liberando a diario, contiene bacterias beneficiosas (lactobacilos) que ayudan a conservar el balance de la microbiota vaginal.
Tal vez no lo sepas, pero una mujer puede producir unos 4 ml (casi una cucharadita) de flujo blanco o transparente cada día. Generalmente, este líquido vaginal cumple varias funciones:
- Ayuda a mantener limpia y lubricada la vagina.
- Conserva los tejidos sanos en el interior del aparato reproductor femenino.
- Ofrece protección contra irritaciones e infecciones ginecológicas.
Tipos de flujo vaginal
Es normal que, de acuerdo con el ciclo menstrual o reproductivo, el flujo vaginal cambie de cantidad, color y consistencia. Puede ir de pegajoso y blancuzco a una secreción líquida y transparente.
También existen otras tonalidades que se consideran normales y otras, por el contrario, pueden indicar una patología subyacente.
Conoce ahora los tipos de secreciones vaginales de acuerdo con sus colores. ¡Este es el significado de cada uno de ellos!
Blanquecino
Si te consigues una secreción entre color crema y blanco lechoso en tu ropa interior, lo más seguro es que se trate de un flujo normal. Es muy frecuente al principio y al final de cada menstruación.
Tiene una apariencia elástica, su cantidad es escasa y no debería oler ni causarte picazón.
Si te estás cuidando de un embarazo con anticonceptivos hormonales, como la píldora, la secreción blanquecina puede ser más abundante, debido a los cambios hormonales.
En todo caso, que sea blanquecino es un buen indicativo, porque corresponde a la lubricación vaginal natural, con o sin sexo.
Transparente
Que tu flujo sea transparente y que tenga la consistencia de la clara de huevo es una señal de normalidad. Puede verse transparente por estas razones:
- Si estás en el día 14 de tu ciclo menstrual puede indicar que estás ovulando y que estás produciendo más mucosidad cervical.
- La excitación sexual o hacer deportes puede generar un flujo transparente y acuoso, debido a la dilatación de los vasos sanguíneos.
- Si estás embarazada, no es extraño producir flujo cristalino o blanquecino, debido a los cambios hormonales.
Rojo-café
El flujo vaginal de rojo a marrón seco con sangre es normal si tienes la menstruación. Puede ir desde el rojo cereza hasta el marrón óxido. Pero si sale flujo rojo todo el mes, puede ser un problema médico.
Ten en cuenta que los ciclos menstruales irregulares, el uso de anticonceptivos o los cambios hormonales, pueden hacerte manchar la ropa interior con estas tonalidades.
Amarillo-verde
El flujo amarillo pálido o verdoso puede ser normal, sobre todo, si estás consumiendo suplementos vitamínicos o ciertos alimentos. Pero pueden indicar infección si es amarillo oscuro o muy verde.
Rosa
Las secreciones rosadas, sean ligeras o fuertes, pueden estar asociadas con el inicio de tu menstruación o ser producto del sexo. En otras ocasiones, puede poner en evidencia algún problema de salud.
Gris
Si el flujo no es blanquecino, sino grisáceo, como el color de las nubes durante una tormenta, no es normal y menos, si huele a pescado.
Esto suele ser una señal de vaginosis bacteriana que si bien, es muy frecuente en las mujeres, necesita tratamiento con ungüentos o antibióticos orales.
¿Cuándo preocuparse?
No dudes en ir a consulta médica si observas estas situaciones:
- Flujo vaginal espumoso o grumoso. Si es como el requesón, puede tratarse de una infección micótica como la candidiasis.
- Dolor, ardor o picazón alrededor o dentro de la vagina.
- Olores fuertes o desagradables en el flujo. Puede indicar una vaginosis bacteriana u otro problema como la tricomoniasis.
- Erupciones cutáneas, inflamación, enrojecimiento o llagas en tu zona íntima.
De acuerdo con la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, siempre que los tipos de flujo vaginal estén acompañados de dolor o picor, puede tratarse de un proceso inflamatorio como la vulvovaginitis (vaginitis).
Entre los consejos para prevenir la vaginitis y alteraciones en tu flujo vaginal te recomendamos:
- Usa solo ropa interior de algodón transpirable.
- Evita las duchas vaginales sin prescripción médica.
- Come alimentos ricos en probióticos, como el yogur natural o el kéfir. Estos pueden ayudarte a tener una flora vaginal equilibrada y sana.