¿El estrés puede ser un factor desencadenante de la dermatitis?
Para tratar la dermatitis por estrés es recomendable aplicar cremas hidratantes tras el baño.
La ansiedad, la depresión o el estrés pueden provocar brotes de dermatitis
El cuerpo grita lo que nuestra mente calla y ello se refleja en las numerosas patologías que aparecen sin explicación aparente. Por ello, hoy hablamos de la dermatitis por estrés y cómo esta circunstancia actúa de desencadenante.
Para entender esta enfermedad primero hay que saber qué es la dermatitis atópica, ya que es la que suele verse afectada por el estrés. Según detallan las psicólogas Alicia Salamanca y Nohelia Hewitt en su artículo 'Factores biológicos y psicológicos de la dermatitis atópica', se trata de una alteración cutánea sin causas identificadas.
"La atopia se asocia con la hiperactividad del sistema inmune, la cual puede producir enfermedades inflamatorias de la piel, tal como la dermatitis atópica", indican las profesionales. "Es un padecimiento inflamatorio crónico y recidivante de causa desconocida, caracterizado por piel seca, con bajo umbral al prurito, en general, esta enfermedad tiene un inicio temprano en la infancia", añaden.
Relación entre dermatitis y estrés
Salamanca y Hewitt apuntan que la dermatitis atópica es una enfermedad crónica multicausal y mencionan los siguientes aspectos relevantes:
- Tiene una asociación directa con el estrés, la depresión y la ansiedad como "elementos que precipitan y mantienen el trastorno".
- Asimismo, nombran las experiencias traumáticas en la niñez, la personalidad ansiosa y las dificultades en las relaciones sociales como predisponentes en esta patología.
- Por otro lado, el estado de la piel (con prurito y descamación) aumenta el impacto emocional del paciente.
"Para el paciente, la dermatitis atópica constituye un factor estresante crónico que no sólo implica molestias e inconvenientes físicos sino también consecuencias en su vida personal, social y su actividad cotidiana", subrayan las expertas.
Tratamiento de la dermatitis por estrés
Uno de los tratamientos que aconsejan las psicólogas es acudir a terapia. De esta forma, los pacientes con dermatitis atópica reducen sus niveles de ansiedad, estres y depresión al tiempo que desaprenden creencias y mejoran su calidad de vida.
Por otro lado, desde el Consejo General de Farmacéuticos (Cgcof) aportan las siguientes recomendaciones:
- Usar jabones neutros (syndet) para no irritar la piel.
- Secar de forma suave la zona y no frotar.
- Hidratar la piel tras el baño y así se alivia el picor provocado por la dermatitis atópica.
- Los productos emolientes o hidratantes que se usen no tienen que tener perfumes o hipoalergénicos.
- Evitar sudar o pasar mucho frío o calor.
- Utilizar ropa de algodón o tejidos naturales.
"En caso de dermatitis atópica en niños, se recomienda que se les bañe a diario con agua tibia y con un máximo de 15 minutos de duración. También es recomendable mantener siempre las uñas del niño cortas y limpias, para evitar que se haga daño al rascarse", concretan para los más pequeños de la casa. De hecho, el 18 por ciento de la población infantil sufre esta patología, pero en muchos casos desaparece cuando crecen y cumplen los tres años.
En las farmacias se pueden encontrar numerosos productos que acabamos de nombrar. Estas cremas o geles son de venta libre y el farmacéutico puede aconsejar sobre cuál es mejor para cada paciente, según la gravedad de la enfermedad.