Jarabe para la tos en niños: cómo elegir el adecuado
Los jarabes son los productos más recomendados para tratar la tos.
A la hora de elegir el jarabe infantil adecuado, primero hay que saber diferenciar entre tos seca y productiva
Los resfriados son una de las afecciones más comunes durante esta época del año. Los cambios de clima bruscos o la exposición a algún tipo de virus son algunas de las causas más comunes para padecerlo, siendo el dolor de garganta y la tos algunos de sus principales síntomas. Por esta razón, uno de los tratamientos más recomendados para este tipo de afección son el jarabe para la tos, especialmente en niños.
Los jarabes para la tos infantiles son productos antitusivos que se administran en niños que presentan una tos que agrava la patología respiratoria. Por ello, el primer aspecto a tener en cuenta para elegir correctamente un jarabe para la tos y saber si está siendo útil es conocer de qué tipo de tos se trata.
Tipos de tos
Desde el Consejo General de Farmacéuticos (COF), explican la diferencia entre los dos tipos de tos que existen:
- Tos seca: es aquella en la que no se produce expectoración. Está provocada, en la mayoría de los casos, por la irritación de la garganta.
- Tos productiva: ayuda a eliminar las secreciones, por lo que no deben suprimirse, sino administrar tratamientos que faciliten esta secreción, como serían los jarabes con mucolíticos o expectorantes. El uso de un jarabe antitusígeno, que actúa suprimiendo el reflejo de la tos, resultaría contraproducente, provocando una mayor obstrucción de la vía aérea.
Jarabes para la tos seca
Tal y como señalan desde COF, según el tipo de tos debe utilizarse uno u otro jarabe. En el caso de tos seca se recomiendan los siguientes:
- Jarabes antitusígenos: sin codeína a menores de 12 años.
- Dextrometorfano o cloperastina: todos ellos suprimen el propio reflejo de la tos.
Jarabes para la tos productiva
Mientras que para los casos de tos productiva es recomendable usar los siguientes jarabes:
- Mucolíticos: como acetilcisteína y carbocisteína, que disminuyen la viscosidad de la secreción,
- Expectorantes: como bromhexina o guaifenesina, que estimulan los mecanismos de eliminación de mucosidad. Este tratamiento se debe acompañar de un consumo abundante de líquidos.
Efectos perjudiciales para la salud de la codeína
La codeína es un opioide que se encuentra autorizado para el tratamiento sintomático del dolor de intensidad leve o moderada y de la tos improductiva. En el año 2013, el Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia europeo (PRAC) realizó una revisión acerca de la relación beneficio-riesgo de los fármacos que contenían codeína y se encontraban indicados para el tratamiento del dolor en la población pediátrica.
Según afirman los farmacéuticos, se observaron algunos trastornos respiratorios nocturnos relacionados con la codeína, un riesgo que aumenta si el niño tiene sobrepeso. Además, no existían suficientes evidencias de que el medicamento funcione para aliviar la tos en niños.
¿Cuándo no administrar codeína en niños?
En base a las conclusiones de la PRAC, la AEMPS estableció las siguientes recomendaciones acerca del uso de codeína para el tratamiento de la tos asociada a procesos catarrales en población pediátrica. No debe utilizarse codeína en:
- Menores de 12 años de edad.
- Pacientes que son metabolizadores ultrarrápidos: debido a que presentan un alto riesgo de sufrir una intoxicación por morfina
- Mujeres durante la lactancia: debido al riesgo que presentaría el niño de sufrir reacciones adversas graves en caso de que la madre fuese metabolizadora ultrarrápida.
- No es aconsejable el uso de codeína en pacientes de 12 a 18 años de edad que presenten compromiso de la función respiratoria debida por ejemplo a trastornos neuromusculares, patología respiratoria o cardiaca grave, infecciones pulmonares, trauma múltiple o pacientes que hayan sido sometidos a procedimientos quirúrgicos extensos.
Miel de abeja: ¿es eficaz contra la tos?
Otra de las preguntas más frecuentes es sobre si la miel disminuye los síntomas catarrales como la tos. La respuesta es sí. La miel de abejas se utiliza como remedio natural para la tos, ya que es rica en vitaminas, minerales y antioxidantes.
Por esta razón, ayuda a reducir la inflamación, alivia la garganta e impide el crecimiento de gérmenes como bacterias o virus. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la identifica como un tratamiento demulcente para la tos. Es decir, que actúa aumentando la producción de saliva y por tanto recubriendo los receptores sensoriales periféricos que la desencadenan.