15 remedios para aliviar el ardor de estómago

Ya está otra vez el ardor de estómago. Siempre puntual, tras las comidas, y recorriendo el camino inverso que han hecho los alimentos hace unas horas. Esta sensación no es nada cómoda, por ello, los expertos nos señalan los remedios para el ardor de estómago y por qué se produce.

"El ardor de estómago o acidez gástrica es una sensación de quemazón que puede aparecer en la boca del estómago y puede llegar a notarse hasta en la garganta", apunta Iván Espada, farmacéutico del Consejo General de Farmacéuticos (Cgcof).

Tal y como relata Espada, el estómago produce ácidos tras las comidas, lo cual "es normal y conveniente para facilitar la digestión de los alimentos". Sin embargo, cuando esta producción es excesiva da lugar a la sensación de ardor o pirosis.

Tratamiento para el ardor de estómago

En la farmacia se pueden encontrar diferentes remedios para el ardor de estómago. Espada apunta los siguientes:

Medicamentos antiácidos: no requieren receta médica y alivian los síntomas del ardor de estómago. Es conveniente que el profesional farmacéutico aconseje cuál es el mejor para cada paciente.
Complementos alimenticios con doble acción, ya que neutralizan el pH del estómago y forman una barrera protectora.
Regaliz puro: su consumo protege al estómago de las úlceras gastroduodenales y evita el ardor de estómago.

Estas opciones están disponibles en sobres, cápsulas, gotas, comprimidos e incluso masticables.

No obstante, el farmacéutico subraya que antes de recomendar un antiácido es necesario saber algunas particularidades del paciente:

Tiene hipertensión arterial, enfermedad renal o del corazón.
Toma calcio de forma adicional.
Sigue una dieta baja en sodio.
Es diabético.
Está en tratamiento con otro medicamento.

Consejos para el ardor de estómago

Asimismo, existen otras medidas no farmacológicas que pueden llevar a cabo las personas que tienen ardor de estómago recurrente. Laura Pérez Roncero, farmacéutica comunitaria en Bilbao, apunta estos consejos en su artículo 'Curso básico sobre Patologías digestivas. Tema 2. Pirosis':

Comer una dieta variada y equilibrada. La experta señala que deben ser entre 5 o 6 comidas al día.
Masticar bien los alimentos y comer sin prisas.
Evitar comidas copiosas y ricas en grasas.
Conocer cuáles son los alimentos ácidos o irritantes y no tomarlos. Por ejemplo, las bebidas alcohólicas, el té, el café y el tabaco favorecen el reflujo gastroesofágico y empeoran los síntomas.
Comer abundantes hidratos de carbono y proteínas para aumentar el tono muscular.
También es importante no ingerir alimentos demasiado calientes.
No hay que acostarse inmediatamente después de comer o cenar. "Hay que dejar transcurrir al menos una o dos horas. La acción de la gravedad hace que la posición de bipedestación favorezca el aclaramiento gástrico", afirma Pérez.
Tampoco se debe hacer ejercicio físico después de comer.
A la hora de dormir, es preferible hacerlo del lado izquierdo del cuerpo. Así se facilita el vaciado gástrico y se evita el reflujo.
Elevar la cabecera de la cama entre 15 y 30 centímetros. "Cuando se duerme con la cabeza a un nivel más alto que el estómago se reduce la posibilidad de que los alimentos se devuelvan al esófago", detalla la farmacéutica.
Las personas con sobrepeso u obesidad tienen que perder kilos.
Realizar ejercicio físico durante la semana.
No llevar ropa ajustada ni cinturones que aprieten, ya que la presión abdominal aumenta.
Por último, en caso de tomar fármacos irritantes o gastrolesivos, hay que proteger la mucosa gástrica con un tratamiento adecuado.