Consejos útiles si tienes un esguince grado 2
¿Has sufrido un esguince de grado 2? Te detallamos el tratamiento a seguir y algunas medidas de prevención para reducir el riesgo de sufrirlo.
Descubre consejos útiles para un esguince de grado 2
Una de las lesiones en las articulaciones más frecuentes y que puede sufrir casi cualquier persona son los esguinces. Hay varios grados de esguince y uno de ellos, el esguince grado 2 o moderado, tiene una sintomatología y tratamiento muy específico.
Tanto si llevas una vida activa o si mantienes hábitos sedentarios, puedes correr el mismo riesgo de sufrir un accidente de este tipo. Un movimiento brusco, un tropiezo en un escalón o un traumatismo fuerte pueden desatar esta dolorosa y desagradable situación.
¿Qué hacer si sufres un esguince grado 2? ¿Hay maneras de prevenirlo? Sigue leyendo que te lo contaremos todo a continuación.
¿Qué es un esguince de grado 2?
El esguince grado 2 es una lesión severa que aparece cuando uno o más ligamentos en una articulación se estiran más de la cuenta.
Todos los esguinces, independientemente de su grado, se caracterizan por la inflamación y el dolor. Pueden aparecer hematomas y la función de la articulación se puede ver comprometida. Todo dependerá de la gravedad de la lesión.
En el caso del esguince de grado 2 se pueden experimentar los siguientes síntomas:
- Dolor moderado o intenso.
- Hematoma o coloración rojiza en el área afectada.
- Inflamación notoria.
- Rigidez o imposibilidad de apoyarse en la articulación.
- Pérdida funcional de la articulación comprometida.
Es importante que consultes siempre a un médico ante cualquier lesión en una articulación. Solo un profesional de la salud te puede indicar el nivel de severidad de tu lesión y cuál será el mejor tratamiento en caso de que se trate de un esguince.
Consejos útiles si tienes un esguince de grado 2
Si sufres un esguince grado 2, ten en cuenta que la recuperación puede llevarte entre 30 días y 6 meses. Pero todo dependerá de la gravedad del asunto y si hay rotura de huesos.
Ahora, echa un vistazo a esta lista de consejos útiles para tratar y recuperarte de un esguince de segundo grado:
Guarda reposo
Es muy importante, sobre todo en los primeros días de la lesión, que inmovilices la articulación afectada o uses muletas. En caso de un esguince de tobillo o de rodilla, por ejemplo, esto puede ser crucial para la buena recuperación.
Aplica terapia de frío
Colocar una bolsa de hielo sobre la lesión, cada cuatro horas, puede ayudar a bajar la inflamación durante los dos o tres primeros días del traumatismo.
Eleva la articulación
Mantener en alto la parte afectada puede ayudarte a bajar la inflamación, ya sea que se trate de un esguince de rodilla, tobillo, muñeca o cualquier otra articulación.
Ejerce compresión
Colocar un vendaje en la articulación lesionada puede reducir la hinchazón y contribuir a mantener unidos los ligamentos durante las primeras semanas.
No descuides tu tratamiento
Como terapia médica complementaria, el médico puede indicarte antiinflamatorios no esteroideos y vendajes de compresión específicos. Solo al bajar el dolor y la inflamación, podrían indicarte diversos ejercicios de rehabilitación.
Evita las secuelas
La aplicación correcta de un tratamiento de fisioterapia o de rehabilitación es clave para prevenir los síntomas de un esguince mal curado como lo son un dolor prolongado o una recuperación más lenta.
Ármate de paciencia
Por lo general, la recuperación de un esguince grado 2 suele llevarse entre cuatro a ocho semanas, aunque puede requerir mucho más tiempo como te contamos más arriba.
En todo caso, necesitarás armarte de mucha paciencia durante tu recuperación y seguir al pie de la letra las recomendaciones que te dé el personal de salud.
Prevención en todo momento
Si ya tuviste un esguince grado 2 y lo superaste, deberás estar alerta para que no se repita. Y si nunca lo has sufrido, estos consejos también pueden ayudarte a reducir los riesgos de que ocurra. ¡Toma nota!
- Antes de hacer deportes o actividad física, precalienta bien tus músculos y articulaciones.
- Realiza estiramientos antes y después de cualquier actividad física.
- Lleva zapatos cómodos, en buen estado y evita los tacones.
- Ten cuidado al caminar, correr o moverte sobre superficies irregulares o desniveles.
- Practica ejercicios o actividades que te ayuden a ganar fuerza, flexibilidad y equilibrio.
- No efectúes movimientos, deportes o actividades bruscas que no conoces o que llevas tiempo sin hacer.
- Si llevas tiempo con inactividad, consulta a tu médico antes de probar algún deporte.
Los esguinces más frecuentes son los de tobillo, rodilla o muñeca, aunque pueden darse en el hombro, en la cervical o en cualquier otra zona del cuerpo.
¡Ahora ya sabes qué hacer!