Lágrimas artificiales: cómo usarlas correctamente
La dosis aconsejada para las lágrimas artificiales es de una gota de 3 a 5 veces al día.
Las lágrimas artificiales se suelen usar para aliviar los síntomas de ojo seco o la irritación ocular
¿Te pican los ojos? ¿Los notas secos? Las lágrimas artificiales pueden ser una buena solución para acabar con estas molestias oculares. Concretamente, en este artículo de Apoteka hablamos de la hipromelosa, un fármaco que pertenece al grupo de las 'lágrimas artificiales'.
"La hipromelosa actúa lubricando la superficie ocular y mejorando los síntomas de la sequedad ocular. Está indicada para el alivio sintomático de la irritación y el ojo seco", explica Irene Suárez, farmacéutica del Consejo General de Farmacéuticos.
Este medicamento puede adquirirse en cualquier farmacia comunitaria en colirio en formato de frasco o como unidosis.
Claves para usar las lágrimas artificiales
Para utilizar las lágrimas artificiales de forma correcta, ya sea la hipromelosa u otro tipo, la experta señala las siguientes claves:
- La dosis recomendada para adultos es de una gota en el ojo de 3 a 5 veces al día o según las pautas establecidas por el médico. No obstante, para el síndrome del ojo seco es necesario ajustar la dosificación de manera individual.
- Es importante lavarse las manos antes de usar cualquier colirio y no poner en contacto el gotero con el ojo o con cualquier superficie. La higiene de la zona (ojos y manos) es fundamental.
- Para colocar la gota y poner el colirio, hay que tirar hacia abajo del párpado inferior y formar una bolsa y es entonces cuando se aplica una gota. A continuación, hay que parpadear varias veces.
- Si el paciente está aplicando otro medicamento por vía oftálmica, hay que espaciar al menos 5 minutos las aplicaciones de los diferentes medicamentos.
Por lo tanto, la higiene y el correcto uso del medicamento es clave para que haga efecto. Asimismo, los expertos también aconsejan realizar baños oculares para aliviar la sequedad ocular.
Reacciones adversas de las lágrimas artificiales
Suárez subraya que utilizar lágrimas artificiales no afecta a la capacidad para conducir. No obstante, sí que puede dar lugar a visión borrosa transitoria tras su aplicación. Por ello, se aconseja no conducir hasta recuperar la visión normal.
"Las reacciones adversas más frecuentes son sensación de quemazón, visión borrosa, y párpados pegajosos", afirma la farmacéutica.
Las pantallas favorecen la aparición de ojo seco
En este mismo sentido, desde la vocalía nacional de Óptica y Optometría del Cgcof alertan de que las horas de exposición a los dispositivos móviles y el uso de la mascarilla estos últimos meses han provocado un aumento de casos de ojo seco. De hecho, esta patología ocular afecta a entre el 15 y el 30 por ciento de la población.
Además de las causas que acabamos de nombrar, María Isabel de Andrés, vocal de Óptica del Cgcof, señala que la edad, el uso de lentillas, ciertas infecciones y algunos medicamentos son responsables del ojo seco.
Tipos de lágrimas artificiales
En cuanto a las diferentes lágrimas artificiales que hay en el mercado están las siguientes con sus características:
- Baja viscosidad: son ligeras y acuosas, con diferentes grados de lubricación, producen un alivio rápido y su efecto es breve, lo que quiere decir que se deben aplicar con frecuencia.
- Alta viscosidad: son gelatinosas, con lubricación de larga duración y se recomienda usarlas antes de acostarse.