Dolor de piernas en reposo: ¿Por qué ocurre y qué hacer?
Más de nueve millones de españoles sufre de piernas cansadas.
Los trastornos de origen muscular son la primera causa de dolor crónico
Los dolores musculares o mialgias son una causa frecuente de consulta médica, pueden afectar a uno o varios músculos del cuerpo y en la mayoría de los casos tienen un carácter benigno y autolimitado. En España, los trastornos de origen muscular constituyen la primera causa de dolor crónico y suelen presentarse generalmente en personas de menos de 50 años que realizan actividades laborales y/o deportivas repetitivas que originan contracturas y algias musculares. Pero, ¿por qué aparece dolor en las piernas cuando se está en reposo?
Las farmacéuticas Eva Ramos, Cristina Blas y Sofía López informan en una publicación de Elsevier de que las los dolores musculares se clasifican en diferentes tipos según su relación con el ejercicio, siendo uno de ellos el dolor muscular en reposo, el cual no suele estar asociado a enfermedad muscular si no hay debilidad. De este modo, las causas más habituales asociados a este trastorno tienen que ver con:
- Lesión o trauma
- Sobrecarga
- Tensión o estrés
La actuación para combatir el dolor dependerá de la gravedad del proceso y de las respuestas facilitadas por la persona con respecto a la forma en que tuvo lugar la lesión. Cuando la mialgia se relacione con estrés o tensión, son útiles las técnicas de relajación. Mientras que si se trata de una lesión leve, el farmacéutico podrá aconsejar la utilización de antiinflamatorios tópicos y analgésicos por vía oral.
Otras causas del dolor de piernas en reposo y prevención
En otro artículo de la misma revista, se advierte de que más de nueve millones de españoles sufre de piernas cansadas, es decir, manifiestan pesadez, hinchazón, hormigueo e incluso dolor en las piernas debido a problemas circulatorios. "El estar mucho tiempo tanto de pie como sentado dificulta el retorno venoso y, por consiguiente, favorece la formación de varices", explican los especialistas.
De hecho, cuentan que el síndrome de la clase turista debe su nombre al poco espacio existente entre los asientos del avión, donde los pasajeros permanecen muchas horas sentados. "Esta inmovilidad perjudica la circulación sanguínea y puede ocasionar la formación de coágulos en las venas de las piernas", alertan.
Por el contrario, insisten en que el ejercicio físico comporta la contracción muscular y, secundariamente, la compresión venosa facilitando así el flujo ascendente de la sangre y evitando la aparición de varices.
Para frenar el desarrollo de esta enfermedad, los expertos detallan que el paciente afectado debe cooperar modificando sus hábitos dietéticos y de actividad física siguiendo estos pasos:
- Andar siempre que sea posible, evitando el uso de cualquier vehículo
- Cuando haya que permanecer mucho tiempo de pie, flexionar de vez en cuando los músculos de la pantorrilla
- Evitar permanecer inmóvil, tanto de pie como sentado, durante un largo intervalo de tiempo
- Ponerse medias de descanso, especialmente durante el embarazo
- No vestir con ropa estrecha
- Evitar llevar zapatos estrechos y de tacón
- Evitar el sobrepeso y el estreñimiento
- Practicar ejercicio físico, siendo la natación y el ciclismo los más recomendados para favorecer el retorno venoso
- Antes de acostarse, aplicarse duchas de agua fría en las piernas a la vez que se realiza un masaje de rotación de los pies. Posteriormente, darse un masaje con las piernas elevadas, desde el tobillo hacia la rodilla
- Procurar descansar y dormir con las piernas ligeramente elevadas, unos 20-30 centímetros